Hasta hoy se ha podido ver en el Torreón Fortea de Zaragoza la exposición de Gonzalo Tena Being. En esta ocasión parte de A Long Gay Book, un texto de nuevo de Gerturde Stein que el propio Gonzalo califica de muy difícil, y del que ha elegido frases muy rítmicas, muy musicales. En ocasiones ha trabajado con frases completas, en otras con pequeños fragmentos que al pintor le han resonado en la cabeza, o con un pequeño grupo de palabras cuyo sonido producen el efecto de una pieza musical. “esta mujer hace con la escritura lo que me gustaría hacer a mí en la pintura.” (F.J. Millán, “La desmitificación del arte”, Diario de Teruel, 1 de noviembre de 2010, p. 4-5)
En varias entrevistas ha señalado que en estas series ha partido de un cierto cariño por la obra de Antonio Saura y conseguido volver al placer de la pintura, de estrujar botes, mezclarlos y de mancharse, incluso, en el proceso. El resultado es una pequeña y controlada explosión de color sobre el sempiterno fondo negro, reflejo del fértil periodo creativo y vital que está viviendo Gonzalo Tena.
El texto del catálogo corre a cargo del critico barcelonés Jesús Martínez Clarà y lleva el titulo de “Tropismos”, término que “ha quedado para la cultura como un sinónimo de actitudes creativas fragmentadas, discretas, como el síntoma inconcluso de una acción y como calificativo útil para todos aquellos que como Gonzalo Tena aparecen y desaparecen de la escena del arte y que actúan de modo discontinuo, discreto y perseverante.”
De este texto, que puede leerse integro en el blog de Martínez Clarà, extraemos tres fragmentos:
Uno, sobre la percepción: “El espectador se ve obligado a recomponer sus maneras de enfrentarse a una obra en la que se le exige la atención máxima a todos los detalles, incluso los más insignificantes. Él mismo se considera un buen observador y una de sus facetas más destacadas es la que denomina: "la tarea del entomólogo crítico", es decir la capacidad que tiene este artista por percibir los minúsculos aspectos de la vida y aplicarlos a su arte , exigiendo máxima atención a lo menor. Cuando hablas con él, te das cuenta del valor que da a una mirada o a un gesto, la importancia de la memoria y de lo circunstancial.”
En este sentido, sobre el papel del espectador, F.J. Millán recogía que Gonzalo “es de los que piensan que el público es quien termina de construir la obra de arte. Si alguien ve una de las Meninas en sus dibujos, será una de ellas, aunque la serie trate sobre diosas de la antigüedad”
Otro, sobre la factura “Entre marañas, manchas, líneas, garabatos y perímetros, los refinados colores acrílicos van gestando abstracción a base de ser precisos en su ubicación y tratados de modo delicado.”
Y el último: “Hay un extraño poder en los signos que parecen reclamar el regreso al origen de lo que están designando del mismo modo que la palabra concreta del lenguaje puede devenir abstracción.”
Martínez Clarà ya dedicó en abril de este año, una entrada en su blog al artista turolense con el titulo “Gonzalo Tena versus Gertrude Stein”.
Reseñable es el diseño del catálogo, del que se han encargado el propio artista y su hijo Andrés. En él rompen con la habitual configuración de texto al principio y repertorio de imágenes detrás. El texto ocupa el eje central de cada página y las imágenes lo escoltan a los lados. Las series no se presentan completas y en muchas ocasiones, en la propia portada incluso, las imágenes quedan rotas, sólo se presenta un fragmento, remarcando así su carácter serial, de work in progress y consiguiendo proyectar la serie hasta el infinito.
El programa Borradores incluyó un reportaje sobre Being en la emisión del día 16 de noviembre en el que el artista comenta su trabajo, y que se puede ver a partir del minuto 22.
Gonzalo Tena, Being, Ayuntamiento de Zaragoza, 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario